Relación capital humano y remesas
La migración modifica la vida de los que se quedan, de los que se van y de las sociedades de destino [Herrera, 2004]. La relación costo-beneficio de la migración puede argumentarse por el lado del costo a través de la inversión realizada por el Estado ecuatoriano hacia las personas. En el caso específico del presente documento, se toma la variable educación, debido a que es el gasto del Estado más evidente y el que mayor cobertura tiene; por otro lado, los beneficios económicos del hecho migratorio se evalúan por el ingreso de las remesas.
Antes de 1996, el ingreso por remesas como porcentaje del PIB no superaba 2% y estaba por debajo de la inversión en educación. A partir de 1999, esta relación se invierte, debido a que la serie inversión en educación no presenta variación, mientras que el monto de remesas se incrementa considerablemente. Esto da lugar al aumento de la brecha entre las dos variables.
Gráfica 3. Remesas, educación como porcentaje del PIB
Fuente: Elaboración propia con base en las estadísticas de Educación del SIISE y de Remesas del BCE.
Según el INEC, entre 1996 y 2001 migraron alrededor de 377 908 personas. En ese mismo período ingresaron por remesas USD 6110,00 millones de dólares, aproximadamente USD 16 167.00 por migrante al año. En ese mismo período, el Estado invirtió en educación primaria, secundaria y superior alrededor de USD 1 220.00 millones de dólares, solamente una quinta parte del ingreso por remesas.
De acuerdo con el párrafo anterior, por cada dólar de remesas percibidas entre 1996 y 2001, el Estado invirtió USD 0.19 centavos en educación (primaria, secundaria y superior). De otra forma, por cada dólar que el Estado invirtió en educación recibió USD 5.00 dólares por remesas.
Ante la relación anterior, la Pastoral Social [2006] menciona que:
"Los migrantes poseen formación de nivel medio y superior, lo que constituye una inversión por parte del Estado para su formación. Estas personas, al migrar, se convierten en un ente productivo en otro país y los frutos de su educación y las destrezas adquiridas en Ecuador beneficiarán al país donde se encuentra residiendo. Los profesionales y los técnicos que emigran poseen costos de formación mayores, de igual forma, su capacidad intelectual es desperdiciada, puesto que van a otro país y muchas veces no desempeñan los cargos para los que fueron preparados, sino que ejercen cargos inferiores o que no tienen relación con su profesión. Adicionalmente, existe un grupo de expertos de alto nivel que sale fácilmente del país, principalmente, a EE.UU., los que por su gran capacidad intelectual son bienvenidos, ocasionando en el país la pérdida de ‘cerebros’" [Pastoral Social, Cartilla de migración núm. 18, junio de 2006].Por otro lado, cabe destacar que en Ecuador no se han realizado estudios sobre el efecto multiplicador de las remesas, 4 Adelman y Taylor en 1990 destacan la incidencia positiva de las remesas en el PIB del país receptor. En el caso de la economía mexicana, el efecto multiplicador que generan las remesas es de $2.69 y 3.17 dólares por cada dólar recibido, dependiendo del entorno urbano o rural. Esta misma relación la obtienen Dessai, Kapur y Machale, 2001, en India, donde el efecto multiplicador es de 1.5 y 2 USD por cada dólar recibido. pero existen algunas aproximaciones para conocer el destino de las mismas. Según el estudio del Banco Interamericano de Desarrollo y otros [2003], en el año 2002, aproximadamente un millón de personas recibió remesas del extranjero, esta cifra representa a cerca de 14% de la población adulta del país. Del mismo estudio se desprende que las remesas provinieron de España (44%) y de Estados Unidos (38%) principalmente y fueron destinadas a gastos diarios 61%, inversión en negocios 8%, ahorro 8%, educación 2% y 17% en gastos de lujo. 5 Encuestas realizadas por el Banco Interamericano de Desarrollo –Fondo Multilateral de Inversiones, BID.FOMIN y PEW HISPANIC CENTER PHC 2003. Receptores de remesas en Ecuador, una investigación de mercado. Se realizaron 3320 encuestas en Quito, Guayaquil y Cuenca.
4 Adelman y Taylor en 1990 destacan la incidencia positiva de las remesas en el PIB del país receptor. En el caso de la economía mexicana, el efecto multiplicador que generan las remesas es de $2.69 y 3.17 dólares por cada dólar recibido, dependiendo del entorno urbano o rural. Esta misma relación la obtienen Dessai, Kapur y Machale, 2001, en India, donde el efecto multiplicador es de 1.5 y 2 USD por cada dólar recibido.
5 Encuestas realizadas por el Banco Interamericano de Desarrollo –Fondo Multilateral de Inversiones, BID.FOMIN y PEW HISPANIC CENTER PHC 2003. Receptores de remesas en Ecuador, una investigación de mercado. Se realizaron 3320 encuestas en Quito, Guayaquil y Cuenca.