Semblanza

Luis Sandoval en el mural La conquista de la energía de José Chávez Morado.
Fotografía de la colección del Instituto de Investigaciones Económicas. (04/dic/2008).

Bueno, en lugar de datos aburridos como semblanza, se me ha sugerido plasmar algunas ideas en el papel, lo que me pareció correcto. El problema está en ¿qué cosa escribo? Sobre la economía, pienso yo. Desde los dieciséis años tuve claro que la mejor opción para estudiar una carrera social o humanística era economía, porque pensé que esta opción me permitiría comprender las concatenaciones primarias o fundamentales que están en el fondo de todos los fenómenos sociales. En efecto, así ha sido, pero por otra parte en el ya largo camino me he enterado que en esta "ciencia", por decirlo así, coexisten dos grandes campos que proporcionan distintas explicaciones sobre el acontecer económico, su pasado y las proyecciones que se pueden realizar a partir de las tendencias presentes. Grosso modo, estos campos principales son lo que se podría llamar la teoría económica y la economía política. Sus explicaciones y su sistema de conceptos no podrían ser más antagónicas. Por otra parte, no representan cuerpos cerrados de conocimiento, constantemente se están renovando y adquiriendo nuevos conceptos.

En el momento actual la teoría económica comienza a estar en crisis, ya que no pudo prever el desencadenamiento de la crisis económica mundial contemporánea y no está proporcionando los elementos suficientes para su explicación y menos aún las herramientas para su solución. La teoría económica está trabada por su vinculación con los intereses económicos predominantes en la sociedad, que son los de las grandes empresas transnacionales, los gobiernos, los hombres del dinero. El neoliberalismo, que es la ideología y la política económica aplicada por los economistas que sirven sus dictados, está muriendo, pero antes de morir nos ha sumido en esta gigantesca crisis, comparable a la de 1929-33.

Por el lado de la Economía Política, podemos señalar que a la par que nos encontramos avances en las formulaciones de destacados economistas de esta tendencia, también hallamos rezagos importantes en la formulación de un cuerpo de doctrina que pueda explicar a satisfacción la realidad contemporánea. Esperemos que esta crisis sirva para impulsar estudios satisfactorios en las lagunas que se presentan en este campo.

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Vol. 1, Núm. 0, mayo-agosto/2009, ISSN: en trámite D.R. © Dimensión Económica, Revista Digital
Instituto de Investigaciones Económicas-UNAM, Ciudad Universitaria, México D.F.
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